En momentos de crisis, la inversión es en franquicias

En momentos de cambio y desafío, el espíritu emprendedor argentino se revela más fuerte que nunca.

La incertidumbre política y económica en Argentina ha sido un desafío constante a lo largo de los años. Sin embargo, en medio de este panorama de cambios y desafíos, el sistema de franquicias en el país está experimentando un auge que evoca el espíritu emprendedor y la resiliencia que se vieron en 2001.

De acuerdo con datos preliminares de la Asociación Argentina de Marcas y Franquicias (AAMF), el último cuatrimestre ha presenciado un incremento del 10% en el número de aperturas de franquicias en comparación con el mismo período en 2022. Esto indica una fuerte confianza en el sistema de franquicias y una dinámica favorable para inversores.

Gabriel Sperandini, vicepresidente 2° de AAMF y CEO de las heladerías Persicco, relata que, a pesar del contexto electoral, han abierto cuatro sucursales este año y tienen planes de inaugurar cinco más antes de que finalice el año. Esto subraya no solo el crecimiento del sector sino también la rapidez con la que se pueden concretar inversiones.

La demanda en el sector de franquicias es evidente, como lo señala Susana Perrotta, presidenta de AAMF. En momentos de alta inflación y gran incertidumbre económica, muchas personas buscan invertir rápidamente en un negocio probado y exitoso.

Según datos recientes de AAMF, en Argentina existen alrededor de 1,628 marcas que operan en formato de franquicias, y se espera que esta cifra aumente a pesar del contexto electoral. A pesar de la pandemia, el sector de franquicias ha experimentado un crecimiento sostenido en los últimos seis años.

Este auge se traduce en un aumento significativo de las marcas que adoptan el sistema de franquicias, duplicando su número en los últimos siete años. En 2016, había poco más de 850 marcas que optaban por este modelo de negocio; hoy, ese número supera las 1,650. Esto respalda la idea de que, en medio de las crisis, surgen oportunidades de inversión.

Un ejemplo de esta dinámica se encuentra en la marca Definit, donde el mercado pasó de estar paralizado hace dos meses a ver un flujo constante de emprendedores interesados en adquirir franquicias en diferentes ciudades del país. Las elecciones primarias han aclarado el panorama y estimulado la inversión.

Otro ejemplo es el grupo DG, propietario de marcas como Kentucky, Sbarro, Dandy y Chicken Chill. A pesar de la incertidumbre, han experimentado un aumento en la demanda en el segundo semestre. La ansiedad de los clientes por cerrar operaciones ha impulsado el negocio y se prevé la apertura de 12 locales de diferentes marcas antes de que termine el año.

En resumen, el resurgimiento de las franquicias en Argentina es un testimonio de la resistencia y el espíritu emprendedor en tiempos de cambio. Las franquicias ofrecen una vía segura para la inversión y el crecimiento empresarial, y este es el momento perfecto para explorar estas oportunidades y ser parte de esta emocionante tendencia.

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